miércoles, 22 de diciembre de 2010

Jóvenes y hermosos


La vuelta siempre a los mitos del pasado, a la inocencia, la expectativa absoluta, el futuro en mayúsculas, la gracia de los comienzos… Curioso, triste pensar que nunca volveremos a ser y sentir así, salvo en el recuerdo y en la mirada dada a los encuentros afortunados, por desgracia infrecuentes, con seres extraordinarios; también, quizá, en el espacio virgen de la hoja en blanco, donde aún todo puede -todo debe; nos va la vida en ello- ser posible... Toda historia ha de ser, así, la historia de un comienzo (aunque sea el comienzo de un declive), pues somos tributarios, el resto de nuestras vidas, de los comienzos que coleccionamos entonces, cuando éramos jóvenes y hermosos.

1 comentario:

  1. "Que la vida iba en serio
    uno lo empieza a comprender más tarde.
    Como todos los jóvenes yo vine
    a llevarme la vida por delante".

    Un abrazo, compañero (de viaje).

    ResponderEliminar