Una colección de minúsculos extrañamientos, epifanías de bolsillo, miradas al paso con las que el pensamiento avanza, quizá a ninguna parte, encerrado en el laberinto interior de una polisemia: curioso pensar, este pensar curioso...
miércoles, 16 de febrero de 2011
Un blog sin lectores
126 entradas publicadas, del 10/09/10 al 16/02/11 (apenas 5 meses)
Querida Laura, a los blogs no se los mata, se mueren de falta de lectores. En su mejor momento, este blog fue una conversación, últimamente era un monólogo. Y nadie escribe sólo para escucharse a sí mismo. Supongo que he cansado a los lectores que en algún momento conseguí atraer a este rincón. Valiosa lección, la volubilidad de los lectores.
Yo creo que no debes confundir el hecho de dejar comentarios con que sea o no visitado, que estoy seguro de que lo es y mucho. Otra cosa es que necesites el feed-back.
Totalmente de acuerdo con el señor Elías. Aunque el blog parezca huérfano sin comentarios, te sorprenderías de la cantidad de gente que lo lee aunque no deje ninguno (a mí me pasa algo parecido, y tu blog es bastante más visitado que el mío).
En fin, me tocará una vez más ser el último en aguantar la vela y abandonar el barco. O tempora, o mores...
Resulta que por esto del blogspot sí es posible ver el número de visitas, aunque no dejen comentario. En los momentos de auge de este blog, llegaban a 50, 60 ó 70 diarias. Ahora, difícilmente llegan a 20. De todas formas, más importante que eso es la sequía de comentarios. Repito, en tiempos esto fue una conversación, ahora tengo (tenía) la desagradable sensación de estar hablando solo. Creo, sinceramente, que igual que los lectores exigen ciertas cosas al autor (y me he encontrado en este blog con un par de casos particulares de esto), el autor puede pedir en respuesta un poco más de generosidad a sus lectores. En suma, que no se limiten a la postura pasiva de leer y no decir nada (sea un comentario favorable, desfavorable o directamente difamante), sino que "participen" un poco más. Como hago yo, como lector, en tantos otros blogs.
Pero, ¿cómo mi maestro en esto de los blogs va a dejarme sin más lecciones? Piénsatelo bien y dile al tramoyista que "Levante el telón" y haz que salgan a escena tus "minúsculos extrañamientos, epifanías de bolsillo, miradas al paso con las que el pensamiento avanza". Aunque mis comentarios sean escasos, te puedo asegurar que todas las mañanas paso por tu blog para leerlo, para leerte.
Gracias a todos los que habeis dejado un comentario en esta entrada (gracias, Ber, por lo de "maestro" ;-). Sinceramente no sé qué pasará con el blog, ahora me apetece alejarme un poco, pero no descarto reabrirlo en cualquier momento. Hay mucho curro detrás, mucha ilusión. Sé que a poco que me vuelva a pasar algo interesante (si es que vuelve a pasarme algo interesante ;-P) necesitaré contarlo, y qué mejor ámbito para ello que este blog.
Eso sí, hay al menos una razón positiva para tomarme ese descanso... Y es que me gustaría tener más tiempo para ponerme con algún proyecto más serio, que llevo aplazando sine die... No sé si esta vez saldrá algo más que un montón de páginas de notas, como casi siempre, pero tengo que intentarlo. Ya han pasado casi todos los trenes, y no todos podemos triunfar en la tercera edad estilo Saramago...
????
ResponderEliminarVas a matarlo ???
Por qué?
No lo hagas.... escribes muy bien....
Si no estuviera tan triste te daría mil razones para no hacerlo....
Querida Laura, a los blogs no se los mata, se mueren de falta de lectores. En su mejor momento, este blog fue una conversación, últimamente era un monólogo. Y nadie escribe sólo para escucharse a sí mismo. Supongo que he cansado a los lectores que en algún momento conseguí atraer a este rincón. Valiosa lección, la volubilidad de los lectores.
ResponderEliminarEn fin, gracias por tu cariño, como siempre.
Yo creo que no debes confundir el hecho de dejar comentarios con que sea o no visitado, que estoy seguro de que lo es y mucho. Otra cosa es que necesites el feed-back.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con el señor Elías. Aunque el blog parezca huérfano sin comentarios, te sorprenderías de la cantidad de gente que lo lee aunque no deje ninguno (a mí me pasa algo parecido, y tu blog es bastante más visitado que el mío).
ResponderEliminarEn fin, me tocará una vez más ser el último en aguantar la vela y abandonar el barco. O tempora, o mores...
Resulta que por esto del blogspot sí es posible ver el número de visitas, aunque no dejen comentario. En los momentos de auge de este blog, llegaban a 50, 60 ó 70 diarias. Ahora, difícilmente llegan a 20. De todas formas, más importante que eso es la sequía de comentarios. Repito, en tiempos esto fue una conversación, ahora tengo (tenía) la desagradable sensación de estar hablando solo. Creo, sinceramente, que igual que los lectores exigen ciertas cosas al autor (y me he encontrado en este blog con un par de casos particulares de esto), el autor puede pedir en respuesta un poco más de generosidad a sus lectores. En suma, que no se limiten a la postura pasiva de leer y no decir nada (sea un comentario favorable, desfavorable o directamente difamante), sino que "participen" un poco más. Como hago yo, como lector, en tantos otros blogs.
ResponderEliminarPero, ¿cómo mi maestro en esto de los blogs va a dejarme sin más lecciones? Piénsatelo bien y dile al tramoyista que "Levante el telón" y haz que salgan a escena tus "minúsculos extrañamientos, epifanías de bolsillo, miradas al paso con las que el pensamiento avanza".
ResponderEliminarAunque mis comentarios sean escasos, te puedo asegurar que todas las mañanas paso por tu blog para leerlo, para leerte.
Gracias a todos los que habeis dejado un comentario en esta entrada (gracias, Ber, por lo de "maestro" ;-). Sinceramente no sé qué pasará con el blog, ahora me apetece alejarme un poco, pero no descarto reabrirlo en cualquier momento. Hay mucho curro detrás, mucha ilusión. Sé que a poco que me vuelva a pasar algo interesante (si es que vuelve a pasarme algo interesante ;-P) necesitaré contarlo, y qué mejor ámbito para ello que este blog.
ResponderEliminarEso sí, hay al menos una razón positiva para tomarme ese descanso... Y es que me gustaría tener más tiempo para ponerme con algún proyecto más serio, que llevo aplazando sine die... No sé si esta vez saldrá algo más que un montón de páginas de notas, como casi siempre, pero tengo que intentarlo. Ya han pasado casi todos los trenes, y no todos podemos triunfar en la tercera edad estilo Saramago...
En fin, lo dicho, gracias por leerme.